Hoy la vicepresidenta de la Vega ha comparecido ante la comisión permanente del congreso para valorar la concentración organizada por la Iglesia en defensa de la familia. De la Vega ha asegurado durante su comparecencia que no habrá "ni discriminaciones, ni privilegios" para la iglesia. Vistos los acontecimientos de los últimos días, hay una cosa que queda patente. La iglesia está perdiendo fans. Recomiendo este interesante artículo para contextualizar la situación. (España se seculariza) Nadie puede negar que ya hace mucho tiempo que España dejo de ser Católica, Apostólica y Romana. Tras los oscuros tiempos de la dictadura en que la Iglesia impregnaba la vida social, hoy la realidad que se impone es diferente. Entonces cabe preguntarnos, ¿qué sentido tiene todavía mantener unos concordatos con el Vaticano, si España es un estado aconfesional? En ese concordato, aprobado en 1979 bajo el gobierno de la UCD, se establecen dos vías de colaboración entre Iglesia y Estado. Una a través de la famosa casilla de la declaración de la renta. Y la segunda a través de la enseñanza de la asignatura de Religión. Cuando se firmó este concordato todavía el 90% de la población se declaraba católica. Sin embargo, hoy esa cifra ha descendido considerablemente. En aquellos tiempos la iglesia gozaba de un gran poder en la sociedad, hoy a pesar de las manifestaciones su influencia se ha visto mermada. Conclusión: no tiene ningún sentido mantenerlo.
Debo reconocer que me hubiera gustado que en el programa del PSOE se prometiese que se iba a derogar este concordato. Pero esto según lo que se viene publicando en los últimos días no parece que vaya a ocurrir. Hubiera sido una medida muy valiente por parte del gobierno, pero en fin parece que habrá que esperar otros tiempos.
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