El lunes nos enterabámos vía La vanguardia.es que la infanta Elena y el Marichalar acordaban el 'cese temporal de su convivencia conyugal'. En cristiano parece ser dejan de vivir bajo el mismo techo, pero de momento no han iniciado trámites legales. Toda pareja antes de divorciarse, suele tomarse un tiempo de reflexión... Cuando se trata de personajes públicos estas cosas deben anunciarse, pero deben hacerse una vez sea ya algo definitivo. De lo contrario, se puede perjudicar a terceras personas, en este caso a las criaturas de los susodichos. Por tanto, quiza sería más conveniente haber realizado este anuncio, cuando ya la separación fuese definitiva.
El río llevaba sonando demasiado tiempo. Los rumores perseguían a la pareja desde finales de 2001, cuando a Marichalar le dio un ictus. Pero fue la 'gran' MªTeresa Campos, quien predijo en su programa que pronto se iba a dar una noticia que iba a tener fuerte impacto en la Casa Real. No sabemos si la amiga Maritere, tenía fuentes privilegiadas o se aprovecho de los rumores para darle bombo al programa. Sea lo que fuere la Campos ya había puesto a los medios, sobre la pista.
Y ayer cundo la información se hizo pública, estos (los que ya todos sabemos) no perdieron la ocasión de despedazar el asunto, desde la tradicional cronología sobre la relación entre los duques de Lugo, hasta llegar al célebre 'según personas de su entorno'. Y yo me pregunto, ¿por qué tenemos que soportar estos programas 'especiales'? ¿Qué aportan al conocimiento de los ciudadanos, aparte de que ha habido una separación? Este es un asunto delicado, que tan sólo concierne a los interesados, y que en absoluto va a cambiar el discurrir de los acotecimientos de este nuestro país. Así que señores, ústedes ya saben quienes son, tengan un poquito de por favor, que hoy en día parece que busacan la carroña ajena para alimentar sus emisiones.
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